
Y por fin llegó el gol de Fernando Torres. Desde aquel centro de Iván Amaya en el campo del Albacete hasta, otra vez de centro al area, de Vietto han pasado muchas cosas, ha pasado casi entera la carrera deportiva de un jugador emblema del Atlético de Madrid que se marchó para volver. Han pasado tantas cosas en ese tiempo que ha ganado una champions, europa league, y, ha marcado por lo menos mil goles. Pero seguro que este gol número cien con la camiseta del club de su alma ha sido tan especial para él que para tod@s l@s afionad@s.
A pesar de lo que dice la gente , Fernando Torres llegó al Atlético de Madrid para ser importante en el equipo, no para retirarse arrastrándose en el terreno de juego. Para muestra de lo dicho está la intensidad que le pone a cada balón, en cada partido y en cada entrenamiento.
Esta es una efeméride para no olvidar, pero no por Fernando, ni por el club. Es para recordar
por la vida y para toda la vida. Es el ejemplo de que la vida no es todo pasearse por la calle con el objeto de moda ni ir a fiestas con cantantes de moda. Es el "continúe" de un tío que aguantó la tentación y resistió no ser el mejor para la mayoría. Lo de hoy ha sido un ponerse a cien en un segundo, pero no fue ponerse a cien, fue ponerse a mil.


